Hace 85 años, Hachiko, considerado el perro más fiel del mundo, murió en la estación de tren de Shibuya, esperando a su dueño.
Aquí recordamos la historia de Hachiko y algunos datos que quizá no sabías de él.
Su historia se popularizó gracias a la película del 2009 ‘Siempre a tu lado, Hachiko’, protagonizada por Richard Gere.
Dicha película es un remake de Hachikō Monogatari, una película japonesa dirigida por Seijiro Koyama, que narra la vida del perrito desde que era un cachorro hasta su muerte.
Hachiko era un perro de raza akita, que nació el 10 de noviembre de 1923.
La perrita del profesor, Hidesaburō Ueno, había muerto hacia unos meses por lo que su hija lo convenció de adoptar una nueva mascota.
Al profesor le regalaron a Hachiko a principios de 1924 y en poco tiempo se volvieron inseparables.
Hachiko acompañaba todos los días al profesor a la estación de Shibuya, donde tomaba el tren que lo llevaba hasta la Universidad de Tokio donde daba clases.
Por la tarde Hachiko regresaba a la estación para esperar a su dueño y volver juntos a casa.
Su tiempo juntos no duró mucho, pues el 21 de mayo de 1925, el profesor sufrió una hemorragia cerebral mientras daba clases y falleció.
Hachiko como todos los días fue a la estación, pero el profesor nunca volvió.
Hachiko llamó la atención de las personas de los alrededores, quienes comenzaron a alimentarlo y cuidarlo.
Cuando el diario Asahi Shimbun publicó por primera vez la historia de Hachiko, en 1932, comenzó a llamar la atención de los turistas.
En abril de 1934, los habitantes de Shibuya contrataron a un artista y pusieron una escultura de bronce en la estación de tren, Hachiko estuvo presente en la inauguración.
La estatua fue hecha por Teru Ando, un famoso escultor japonés, y con la muerte de Hachiko la escultura de volvió muy famosa.
Tras la muerte de Hachiko, su cuerpo fue disecado y se exhibe en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Ueno.
Durante años la muerte de Hachiko fue un misterio, pero en 2011 se determinó que murió por cáncer cerebral.
Junto a la tumba del profeosr Ueno se construyó un monolito con el nombre de Hachiko grabado.
Según una investigación del Museo Conmemorativo de la Literatura de Shibuya, fue el yakitori, un platillo de pollo, fue el que motivaba a Hachiko a a ir a la estación.
Según su hipótesis, al ver el profesor que su perro lo estaba esperando, lo premio con un poco de yakitori, lo que motivó al perro a seguir yendo.
Sin emabrgo, las personas han decidido seguir creyendo en la historia original de Hachiko y cada 8 de marzo lo recuerdan.