Amazon obtuvo la patente para desarrollar un drone que se autodestruya y disperse sus partes de forma segura ante una colisión inminente.
El drone estará equipado con un controlador de fragmentación que determinará una secuencia de dispersión para las piezas dependiendo de la trayectoria de vuelo, el terreno y el clima. Se deshará ante problemas como: mucho viento que le impida seguir volando de forma segura, o ante temperaturas altas que afecten la batería.
El dispositivo se rompería en varias piezas para evitar lesionar a alguien o a propiedad ajena y calcularía el terreno a su alrededor antes de iniciar la autodestrucción. Amazon cree que si un drone se va a caer es mejor que sea en trozos antes de llegar al suelo donde está la gente.
Trayectoria del drone cayendo en pedazos sobre espacios libres, antes de estrellarse en un árbol.
Amazon busca transformar los servicios de logística en las entregas, sin embargo se ha encontrado con obstáculos por parte del gobierno de EU, como el de la Administración Federal de Aviación que examina la integración segura de los drones en el espacio aéreo.
No es la primera patente que Amazon obtiene sobre la seguridad de sus drones. Patentó ya un paracaídas para paquetes de envío y conjuntos de drones para entregas en grandes ciudades, sin embargo, requieren de la aprobación del Gobierno de EU antes de poder materializarse.
Por el momento, las únicas entregas realizadas con drones han sido para servicios de salud: entregas de sangre o muestras médicas.