Hasta que China prohibió de forma definitiva todo tipo de transacciones con las criptomonedas, algo que algunos calificaron como el golpe de gracia a estas, el gigante asiático había estado viviendo una complicada relación de amor-odio con este activo, dando una de cal y otra de arena; por un lado en China se fundó la popular exchange Binance -creadora de la tercera criptomoneda más capitalizada del mercado, Binance Coin-, y sin embargo poco tiempo después esta tuvo que mudar sus actividades a Japón por las regulaciones de las autoridades comunistas, por un lado ha sido uno de los polos de criptominería más grandes del mundo y sin embargo las autoridades financieras se han empeñado a fondo en que esto deje de ser así y de forma bastante rápida.
Y es que la gigantesca comunidad de criptomineros que albergaba hasta hace poco China ha tenido que buscarse un nuevo destino debido a la nueva postura de Pekín con respecto a las criptomonedas, lo cual tuvo consecuencias en el precio de las mismas en su momento, e incluso lo ha vuelto a tener de nuevo en fechas más recientes, pero antes de analizar los nuevos destinos de los criptomineros vale la pena hablar un poco de en qué consiste la criptominería.
Criptominería, una industria del siglo XXI
Los aficionados al gaming que disfruten de su hobby principalmente a través de un PC probablemente se hayan dado cuenta del incremento del precio de las tarjetas gráficas, elemento del hardware imprescindible para que el equipo pueda soportar juegos de última generación pero también fundamental en el minado de criptomonedas, y vistos los precios que mueven activos como Bitcoin o Ethereum, sumado a la ley de la oferta y la demanda, no es de extrañar que los criptomineros puedan pagar precios más altos que los gamers por las tarjetas y que por lo tanto su precio haya crecido, dado que el minado exige una gran potencia informática y esto se traduce en la necesidad de comprar gran cantidad de tarjetas de gama alta, lo cual por cierto tiene el efecto secundario de generar mucho calor que necesita de una buena ventilación para que el caro equipo se refrigere y no termine estropeado.
Básicamente lo que se hace para minar una vez se dispone del equipo adecuado es resolver unas complicadas operaciones matemáticas que una vez solventadas añaden un nuevo bloque al final de la cadena conocida como blockchain, bloque que contendrá en su interior el registro de las transacciones y operaciones realizadas con la criptomoneda de turno y que quedarán validadas y registradas cuando el bloque ocupe su lugar. Y esta es una de las razones por las que es tan importante la actividad de los criptomineros en el entorno cripto, además de, por supuesto, por el hecho de proporcionar liquidez al mercado.
Como ya se ha dicho hasta hace poco este era un proceso que en una parte nada desdeñable se daba en China, por lo que hasta la prohibición total dictada desde Pekín la influencia de este país en la cotización de criptomonedas como Bitcoin, y por lo tanto la influencia de sus acciones en los análisis de traders e inversores a la hora de elaborar estrategias para operar en los siempre arriesgados mercados era enorme, aunque ya no lo es tanto.
USA y Kazajistán, las mecas del criptominado
Estados Unidos y Kazajistán se encuentran ahora a la cabeza del criptominado a nivel mundial dado que desde la prohibición en China Kazajistán ha visto como la cantidad de mineros en su país aumentaba de forma exponencial, a pesar de que el minado consume gran cantidad de energía y las recientes revueltas empezaron por la subida del combustible, revueltas que a su vez han influido a la hora de bajar la cotización de Bitcoin dado que el gobierno cortó la conexión a internet como una de las medidas para controlar o limitar los disturbios.
Por su parte el gigante norteamericano tiene a su favor el bajo precio de la energía y la estabilidad institucional, aunque todavía está por ver en qué sentido regulará el gobierno federal el mercado de las criptomonedas durante el 2022 y cómo afectará este hecho a las criptomonedas, un activo que por cierto ya ha demostrado ser perfectamente capaz de sobreponerse incluso a las restricciones de un país con tanto peso como China.