Hoy, la nueva apuesta de Microsoft llega al mercado: una versión reducida del Xbox One original de hace casi dos años.
Su nombre es Xbox One S y es 40% más pequeña que la versión anterior lanzada en noviembre de 2013, pero que, técnicamente, es exactamente lo mismo.
No obstante sus entrañas idénticas al Xbox One de siempre, la S tiene capacidad para ejecutar video en 4K, resolución a la que Microsoft le había dado la espalda hace poco menos de tres años.
Además, su arquitectura le permitirá adaptarse a la nueva tecnología HDR10 que permite imágenes más nítidas y una mejor transición entre cuadros.
Su diseño es más práctico, pues integra la fuente de poder dentro de sí para evitar tener un bulto más saliendo de la consola principal.
Ahora sólo queda un enchufe tamaño estándar que podremos conectar cómodamente a la corriente eléctrica.
Sin embargo, además del tamaño ¿por qué te habría de importar el Xbox One S?
Por su precio, mismo que arranca de 300 a 400 dólares por unidad, dependiendo la capacidad de disco duro.
En comparación, el Xbox One lanzado en noviembre de 2013 se vendió en 499 dólares, precio que le arrancó la delantera de las manos a Microsoft y se la entregó en charola de plata a su competencia, la Sony PlayStation 4.
Además, la versión S del Xbox One se vende con un control rediseñado que existe entre el diseño original de hace tres años y el control Elite lanzado un par de meses atrás.
¿Vale la pena comprar esta consola?
Si no tienes un Xbox One, sí, pero recuerda dos cosas: la ‘vieja consola’ se vende ya a 250 dólares en una versión sin Kinect (¿quién lo usaba?) y el próximo año llegará Project Scorpio, una semi-secuela de la Xbox One actual que promete ser brutalmente poderosa y altamente versátil (pero a un costo que posiblemente andará en los 900 dólares).
Si sólo se hubiera lanzado esta versión reducida en lugar del pesado armatoste de apariencia monolítica que recibimos aquel frío noviembre de 2013, probablemente la PlayStation 4 se encontraría en el segundo lugar de ventas de consolas de videojuegos, y no en el primero, como se encuentra ahora.
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