Un ejemplo de acciones que representan un ahorro y dinero bien aprovechado es el estado de San Luis Potosí que, gracias a las medidas de una política financiera que privilegia la disciplina y la transparencia en el manejo de los recursos del estado, han permitido posicionar al estado como el sexto estado con menor nivel de deuda en el país.
Las medidas implementadas por el gobernador Juan Manuel Carreras han permitido que los pasivos del estado se redujeran del 1.1 por ciento, en 2017, a 0.9 por ciento, en el primer trimestre de 2018, ubicándolo debajo de la media nacional, de 2.6 por ciento, de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El gobierno de San Luis Potosí señala que este distintivo se da gracias a que la política de deuda de la actual administración ha dado como resultado la reducción consistente del saldo de la deuda y el incremento en la certidumbre en su manejo a mediano plazo.
Asimismo, se ha señalado que el gobierno de San Luis Potosí ha cumplido puntualmente con el pago del servicio de la deuda pública, por un monto de 497.8 millones de pesos, incluyendo un pago a capital de 151.0 millones de pesos, con lo que la reducción acumulada del saldo asciende a 418.8 millones de pesos, 9.2 por ciento menos de lo recibido por la presente administración.
Como resultado, se ha mantenido la calificación en el nivel de endeudamiento del estado con grado “sostenible”, el máximo otorgado por la SHCP en su Sistema de Alertas, y ha obtenido por primera vez la máxima calificación (verde) en el semáforo de los 3 indicadores relacionados.