A través de redes sociales se viralizó la historia de Max, un perro de Hermosillo, Sonora, que vende cupcakes para pagar su tratamiento, pues tiene los ganglios inflamados de todo el cuerpo.
Max fue rescatado por Yoselín Macías, una joven que se encargó de promocionar los cupcakes a través de su cuenta de Facebook para poder pagar el tratamiento de su perro.
“Vendo cupcakes para pagar mi tratamiento…Soy Max me desecharon de un criadero de perros porque estoy enfermo, tengo todos los ganglios de mi cuerpo inflamados, el más grande está en el cuello necesito que me realicen una biopsia para ver qué tengo”, dice una de las publicaciones.
Tras juntar el dinero para pagar la biopsia, Yoselín también tuvo que comprarle un alimento especial y vitaminas en gel para que Max suba de peso por lo que sigue vendiendo sus cupcakes.
Además, tendrá que someterse a unas quimioterapias para tratar los ganglios que tiene, pero deben esperar los resultados de la biopsia para saber que tipo de quimioterapia.
Yoselín y Max han sido apoyados gracias a la difusión de su historia en redes sociales, los cupcakes han sido un éxito y también han recibido donaciones a una cuenta de banco.