El encarecimiento del dólar y la reducción de incentivos para renovar equipos por parte de las compañías de telefonía provocaron que los mexicanos tardaran hasta dos años en poder comprar un nuevo teléfono.
Pero también hizo que muchos recurrieran a los smartphones usados o reacondicionados, es decir, los dispositivos que tuvieron alguna falla y que se repararon con nuevas piezas para que volvieran a funcionar.
Según un reporte de The Competitive Intelligence Unit (The CIU), por ahora sólo 733 mil de los 96.9 millones de smartphones activos en el país son reacondicionados, pero se estima que esta cifra crecerá en los próximos años.
¿Por qué? Porque más personas conocerán esta alternativa (actualmente sólo 8.7% de quienes tienen celulares sabe qué es un equipo reacondicionado) y buscarán comprar dispositivos más recientes sin gastar tanto en ellos (y sin endeudarse por años para pagarlos), explica el documento.
Además, la idea les parece atractiva, el 25% de los dueños de smartphones encuestados por The CIU dijo que estaría dispuesto a comprar un dispositivo reacondicionado a cambio de un descuento.
¿De cuánto? 54.5% pagaría por el equipo si cuesta 1,000 pesos menos que uno nuevo y 89.5% si el ahorro es de al menos 2,000 pesos.
Si estás considerando comprarte un teléfono reacondicionado, recuerda que lo mejor es que lo adquieras directo del fabricante (Apple, Samsung, etc.), porque ellos cumplen ciertos estándares de calidad al reparar los equipos y no te arriesgas con piezas de dudosa procedencia que hagan que tu equuipo quede inservible en poco tiempo.