Caminar detrás de alguien que va con los ojos pegados a su teléfono no solo es desesperante, también representa un riesgo si esa persona cruza la calle sin advertir posibles riesgos.
Mientras algunas ciudades han optado por poner una especie de semáforo en las banquetas para evitar que los peatones distraídos con sus smartphones sean atropellados, en Hawai pretenden evitarlo mediante penalizaciones.
En la ciudad de Honolulu, una nueva ley busca multar con 15 a 99 dólares a todas las personas que crucen las calles mientras miran sus teléfonos.
La ley fue aprobada por el consejo de Honolulu y ahora sólo falta que el alcalde de la localidad le de el visto bueno.
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