Es bien sabido lo cara que es la vida dentro de la cárcel, pero qué tan complicado se puso que hasta los capos se quejaron del abuso…
Los mismísimos altos mandos de famosos cárteles del crimen organizado se unieron a decenas de internos de los penales federales del Altiplano y de Occidente, para denunciar ante la Profeco el alto precio de los productos que se venden en esas prisiones.
A Vicente Carrillo Fuentes, ex líder del Cártel de Juárez, José Noé Barajas, miembro de Los Caballeros Templarios, Sidronio Casarrubias, líder de Guerreros Unidos y José de Jesús Méndez Vargas, ‘El Chango Méndez’, de La Familia Michoacana, no les cayó en gracia tener que pagar 60 pesos por unos Cheetos.
En su queja explican que, desde la reconfiguración del ‘sistema de tiendas’ en octubre pasado, los precios de la comida chatarra, papelería y productos para el aseo subieron 20%, así que más de 60 internos del Altiplano firmaron la queja, y en el penal de Occidente, más de 70 reos.
La respuesta de la Profeco fue que defenderá a los capos, pero como consumidores.
‘La Profeco reitera que todos los consumidores, independientemente de su condición y de las circunstancias en las que participan como consumidores, incluidos los centros penitenciarios, cuentan con el manto protector de la Ley Federal de Protección al Consumidor, por ser un derecho constitucional’, dijo la dependencia en un comunicado.
La Profeco informó que solicitó a la proveedora de las tiendas de los penales, Klasnic, SA de CV, un informe para acreditar que los precios de los productos dentro del penal sean iguales que los del mercado.
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