Una repostera llamada Marina Aguilar, originaria de Mérida, denunció en sus redes sociales que una clienta le exigió el reembolso de su dinero por un paquete de pastelitos que le compró porque a su nieta no le habían gustado “las chispitas”.
Marina le preguntó a la clienta llamada Sonia si los cupcakes iban en mal estado y ella le respondió que no y les gustaron mucho, pero su nieta pasó “un mal rato” porque no llevaba chispitas de color rosa.
“Quiero un reembolso y ya con eso lo compro en otro lado donde manden chispitas para niño y niña”, escribió la clienta vía Facebook.
Para evitar discutir Marina accedió a regresarle el dinero, pero al preguntarle a qué hora podía pasar por los postres, la clienta le contestó que ya se los habían comido.
Ante esa situación Marina le dijo que no podía hacerle el reembolso, lo que molestó a la clienta y se dedicó a difamarla en grupos de venta de Facebook.
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Clienta acepta su error ante las críticas
A la repostera no le quedó de otra que publicar las capturas de pantalla de la conversación en sus redes sociales para defender su trabajo.
Gracias a que una tiktoker llamada @barbievime le ayudó a contar su historia en unos videos que ya tienen hasta 2 millones de reproducciones, Marina pudo limpiar su imagen y la clienta terminó aceptó que se equivocó.
@barbievime05.90##voiceeffects ##ladypastel ##parati ##lady ##fyp PARTE 2♬ sonido original – Bárbs Medina
“Yo solo quiero decir que todos podemos cometer un error, de mi parte no volveré a pedir pastel a la muchacha, por favor ya no me molesten. Me llegan mensajes de odio que soy una pioja, pero no señores o señoras. Solo soy un ser humano… una hija de Dios que se equivocó”, escribió la clienta con algunas faltas de ortografía.
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