Para evitar otro berrinche de Trump, el fabricante japonés de autopartes Nisshinbo Holdings, retiró una inversión equivalente a 89 millones de dólares que haría en México.
Justo el día en que Nissan reafirmó su compromiso para construir otra planta en nuestro país, esta firma nipona se echó para atrás.
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La pérdida no es poca, pues Nisshinbo Holdings cuenta con 15% de participación del mercado global de sistemas de frenado en automóviles.
La decisión coincide con la reunión de Shinzo Abe, primer ministro de Japón, con Donald Trump en Washington. ¿Qué se habrán prometido para quedar bien?
Por su parte Takayoshi Okugawa, director gerente de Nisshinbo, confirmó este miércoles que México fue descartado de su lista de candidatos para construir su próxima planta de producción:
Hemos abandonado a México. Tenemos que elegir otro sitio que no sea México.
De acuerdo a El Financiero, es la primera vez que una firma nipona anuncia públicamente el abandono de un proyecto en México por amenazas de represalias por parte de Trump.
Mientras tanto, Nissan continuó desafiando las amenazas de Trump, al anunciar que seguía firme con su plan de construir una planta de ensamblaje en ensamblaje.
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