Para ser un apasionado de verdad necesitas tener estas cualidades, mismas que separan a las personas comunes de los que aman lo que hacen.
El Dr. Robert Vallerand de la Universidad de Quebec lleva años estudiando lo que hace la diferencia entre alguien apasionado y ‘los demás’.
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De acuerdo a sus conclusiones, mismas que fueron publicadas por el portal del Foro Económico Mundial, son resultado de un esfuerzo que le llevó a descubrir ocho factores presentes en todos aquellos que se apasionan por lo que hacen y alcanzan el éxito en sus carreras.
Vallerand dice que ‘la pasión es una poderosa inclinación hacia una actividad que define a las personas y que éstas, en turno, aman y consideran importante, tanto, incluso, que le dedican varias horas de tiempo y energía’.
Tener obsesiones
Amar tanto algo que lo metes en tu cabeza de tal forma que no vuelve a salir de allí hasta que lo materializas.
Obsesionarse con un tema y volverlo parte de tu vida es señal de que eres un apasionado de verdad.
Evitar pérdidas de tiempo
A alguien realmente apasionado le aburre perder el tiempo con otro tipo de actividades, pues le quitan tiempo que podría usar para desarrollar eso que tanto le gusta.
Ser optimista
A los apasionados les gusta ‘mirar al frente’, siempre con la mirada fija en su objetivo, por eso, en lugar de enfadarse porque algo ‘no es como quisieran’, se enfocan en llegar a convertirlo en lo que podría ser.
Madrugar
Como dijimos en los puntos anteriores, evitar pérdidas de tiempo, es lo que te separaría de alguien con falsa pasión y dormir demasiado es perder el tiempo. Los apasionados de verdad aprovechan cada minuto que le ganan a la mañana para desarrollar el arte, ciencia o disciplina que les quita el sueño.
Arriesgarse
Amar algo requiere algunos sacrificios y quienes realmente quieren ver materializados sus sueños lo saben, por eso están dispuestos a arriesgar todo para alcanzar sus metas.
Dar el 100%
Nada de trabajos mediocres, si te gusta algo, entonces le dedicarás el 100% de tus energías y atención.
Emocionarse fácilmente
Los apasionados no se aburren porque necesitan pocas cosas para emocionarse con algo a tal grado que siempre viven entusiasmados por ver lo que podrían alcanzar si siguen con esa actitud ganadora.
Convertir el trabajo en su vida
Quienes aman su trabajo le dedican más de tres cuartas partes de su día, lo que vuelve a este factor el definitorio que separa a las verdaderas personas apasionadas de ‘los demás’, de ‘las llamaradas de petate’, de los que viven soñando en lugar de despertar y lograr su cometido.