El magnate mexicano Carlos Slim ha perdido 16,000 millones de dólares desde que Donald Trump hizo públicas sus intenciones de llegar a la Casa Blanca, pero pese a las pérdidas económicas, su popularidad ha ido en aumento.
De acuerdo con Bloomberg, la fortuna del empresario era de 67 mil millones de dólares cuando el ahora presidente de Estados Unidos lanzó su campaña, en junio de 2015, y ahora se encuentra en 51 mil millones de dólares.
La disminución de la riqueza del hombre más opulento del país se relaciona con la depreciación del peso frente al dólar debido al duro discurso de Donald Trump contra México, lo que ocasionó un descenso en las acciones de Slim.
Pero aunque la llegada de Trump al poder golpeó la fortuna del propietario de América Móvil, también le ha ayudado a incrementar su popularidad entre los mexicanos, quienes incluso lo quieren para presidente.
En encuestas realizadas por diarios como Reforma, El Universal y Nación 321 se reveló que los mexicanos, particularmente los jóvenes, lo consideran como un candidato viable para llevar las riendas del país y enfrentar al republicano.
Sin embargo, el empresario ha rechazado su interés por postularse a la presidencia, “mi vocación es empresarial”, dijo durante una conferencia de prensa en enero.
La relación entre Trump y Slim
La relación entre Trump y Slim se complicó durante la campaña electoral en Estados Unidos, cuando Trump se quejó de la cobertura del diario The New York Times, en el que Slim es accionista, llamando a sus reporteros “lobistas corporativos” del mexicano.
Después de las elecciones presidenciales, ambos se reunieron en Florida, donde compartieron una “encantadora cena” a decir de Trump.
Semanas después, durante su conferencia de prensa, Carlos Slim habló sobre la forma en que México podría enfrentar las amenazas derivadas de la presidencia de Trump, como las deportaciones y el posible aumento de los impuestos fronterizos.
