El futuro del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) estaba en duda tras la victoria de Andrés Manuel López Obrador en las elecciones.
Pero ahora, Javier Jiménez Espriú, quien asumiría la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en el gobierno del virtual presidente, informó que se definirá si la obra va o no va mediante una consulta nacional.
La consulta se llevará a cabo en octubre y sus resultados permitirán que la nueva administración decida qué hacer con el proyecto.
“Buscaremos una consulta que nos conduzca a una opinión de la comunidad para que el gobierno que va entrar el 1 de diciembre pueda asumir una responsabilidad, con la opinión ciudadana, de qué es lo qué hay que hacer con un proyecto de esa magnitud”, dijo Jiménez Espriú.
Al inicio de las campañas presidenciales, López Obrador amenazó con cancelar el nuevo aeropuerto y lo rechazó por considerarlo costoso y por su ubicación en el Lago de Texcoco, ofreciendo como alternativa la Base Aérea Militar de Santa Lucía.
Posteriormente suavizó su postura y lo consideró viable, de acuerdo con Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).