El sargazo se ha convertido en un problema para Quintana Roo, pues ha inundado varias playas de Cancún, afectando el turismo y desapareciendo a varias especies marinas, sin embargo, un mexicano le encontró un uso al alga que podría beneficiar a muchas personas.
Omar Vázquez Sánchez utilizó el sargazo para fabricar ladrillos que son más baratos que los de adobe, pero igual de resistentes y duraderos.
Omar tiene un vivero en Puerto Morelos, Quintana Roo e inicialmente utilizaba el sargazo como composta, pero luego se le ocurrió hacer los ladrillos y al comprobar que eran resistentes fabricó en 2018 su primera casa nombrada ‘Angelita’.
El emprendedor terminó la casa en un tiempo récord, sólo tardó tres semanas, y el costo es más barato que el de una casa de interés social por lo que ha llamado la atención de otros países como Estados Unidos y Malasia.
El principal interés de Omar era que las personas de escasos recursos tuvieran una casa propia, y actualmente ya tiene una fábrica.
“Hoy estoy por donar la segunda casa con bloques de sargazo y ya tengo la primera fábrica en Mahahual, donde ya se tiene un stock de más de 100 mil bloques listos para ser usados”, relató Omar a El Financiero.
En un inicio una constructora de Tulum le dio su primera oportunidad, ahora ya tiene un pedido de 600 mil ladrillos y en Tabasco, Campeche y Chiapas, también están interesados.
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