El talento de las indígenas de la Sierra de Chihuahua no se limita sólo a correr maratones.
Usualmente cuando una mujer tarahumara emigra a la ciudad su destino es para trabajar como empleada domestica, pero estas emprendedoras decidieron escapar de eso y actualmente tienen un exitoso taller textil, que no sólo vende en México, sino también exporta a países europeos.
La idea surgió en 2016, cuando María Chávez con ayuda de su empleadora Cecilia Bolado, empezaron a crear nuevas formas de empleo.
“Cosimos una primer blusa […] Mis amigas la vieron y me dijeron: ‘yo quiero una ¡oye ¿donde te la hicieron?”, comentó Cecilia Bolado.
Éste fue su primer paso para incursionar en la industria de la moda. En tan sólo unos días, la demanda aumentó y con el apoyo de diversas instituciones instalaron un taller que actualmente vende en promedio 100 blusas al mes. Sus diseños se venden en Chihuahua, Bélgica, Nueva Zelanda, Irlanda, Inglaterra, Argentina, Perú, Panamá, Canadá y Estados Unidos.
Así nació Kusá una cooperativa donde todas las mujeres que trabajan ganan lo mismo.
“Kusá significa águila en rarámuri y nuestra idea es hacerlas que despeguen, vuelen, y jalen al resto de las mujeres rarámuris, a un mejor nivel de vida”, aseveró Cecilia Bolado.
Pero no se detuvieron ahí, ante el éxito de su empresa, ya proyectan la creación de otras cooperativas que impulsen el desarrollo de más mujeres rarámuris.