El Joker es el claro ejemplo de que no es necesario invertirle tanto a una película para que sea exitosa y deje buenas ganancias.
Hacer la película dirigida por Todd Phillips sólo costó 55 millones de dólares y ya ha recaudado en taquilla más de 900 millones de dólares, 15 veces más que la inversión original.
Sin embargo, no es la única película que ha necesitado poco presupuesto para triunfar. Aquí recordamos otros casos.
Para hacer Whiplash, Damien Chazelle apenas consiguió 3.3 millones de dólares.
Pocos creían en su proyecto, pero Whiplash logró recaudar casi 49 millones de dólares y se llevó tres premios Oscar.
Alejandro González Iñárritú tuvo 18 millones de dólares para hacer Birdman, película con la que se ganó el Oscar a mejor director.
Además, consiguió una recaudación en taquillas de más de 103 millones de dólares.
El Proyecto de la Bruja de Blair fue producida de forma independiente con apenas 60 mil dólares.
La nueva forma de contar una historia, marcó un antes y después en ese género de cine y logró una recaudación de 248 millones de dólares.
Algo similar ocurrió con Actividad Paranormal, el director israelí ,Oren Peli, invirtió apenas 15 mil dólares en hacerla.
La película dejó ganancias por más de 193 millones de dólares y se convirtió en una saga.
Fragmentado tuvo de presupuesto sólo 9 millones de dólares.
La historia fue tan atrapante que logró una recaudación de 277 millones de dólares y una segunda parte de la historia.
James Wan consiguió poco más de un millón de dólares para hacer Saw.
La película recaudó más de 103 millones de dólares y se convirtió en toda una saga, que tiene hasta videojuegos.
Rocky es todo un clásico, pero esa película sólo tuvo un presupuesto de un millón de dólares.
Sin embargo, dejó ganancias por cerca de 225 millones de dólares y se convirtió en una saga.
Lost in Translation fue filmada en sólo 27 días con un presupuesto de 4 millones de dólares.
Logró recaudar casi 120 millones de dólares y Sofia Coppola se llevó un Oscar por mejor guion.
La Teoría del todo tuvo un presupuesto de 15 millones de dólares.
Tuvo una recaudación de más de 123 millones de dólares y un premio Oscar a mejor actor (Eddie Redmayne).
