Originaria de Toluca, esta mujer es para el gobierno de Trump una ciudadana ilegal, pero para la comunidad de Filadelfia es una de las figuras más queridas gracias a sus tacos de barbacoa.
Cristina Martínez cruzó el árido y peligroso desierto llegar a Filadelfia, EU, y lograr el sueño americano. Trabajando en un restaurante fue descubierta por migración y su despido fue inminente, así que buscó dónde seguir cocinando barbacoa: su departamento.
Junto a su marido, Ben Miller, Cristina comenzó yendo al mercado local para invitar a los trabajadores ilegales a que fueran a su departamento a probar sus tacos de barbacoa y el consomé de garbanzos y arroz que preparaba y así darse a conocer.
El siguiente paso fue montar un food truck y dos años después abrió su restaurante, South Philly Barbacoa, que en 2016 fue reconocido como el sexto mejor de los nuevos restaurantes de EU por la revista Bon Appétit.
Hay personas que viajan hasta tres horas en carretera desde Nueva York y Washington para ir al restaurante de la mexicana. Incluso, el alcalde demócrata Jim Kenney es uno de sus más fieles clientes y no dudo en recomendar el South Philly Barbacoa.
Aunque está casada con un estadounidense, Cristina no tiene papeles por haber sido descubierta por migración poco después de haber llegado a EU, la única posibilidad de regularizar su situación es volver a México y pasar aquí diez años.
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