Así es la vida de la campeona de ultramaratones que corre en huaraches…
Lorena Ramírez fue la primera mujer rarámuri que compitió en un ultramaratón en Europa en la categoría de 97 km y a diferencia de sus hermanos hombres, ella nunca fue a la escuela por lo que no habla más que su lengua natal.
Ganó el ultramaratón de 50 km en Tlatlauquitepec, Puebla, vistiendo una falda y un par de huaraches, el calzado de los corredores rarámuri. Mario, su hermano mayor que también corre, es su ‘representante’, entrenador y portavoz.
Él la alienta a ‘entrenar’ y correr por las montañas rocosas. Su rutina incluye largas caminatas y escalar por el monte y no es que les cueste trabajo, de niños caminaban de cinco o seis horas siguiendo a los chivos o acompañando a su padre al pueblo más cercano por comida.
Esto la ha colocado en los primeros lugares de las carreras en las Barrancas del Cobre. Desde los 17 años que empezó a competir lleva más de 15 ultramaratones corridos y siempre en huaraches por temor a resbalar usando tenis.
Su dieta básica incluye frijoles y pinole, un polvo de maíz que al mezclarlo con agua los reanima durante las carreras. Cuando es temporada, también consumen nopales y quelites.
Lorena y su familia corren para vivir, como muchos tarahumaras. A veces trabajan en los campos de manzanas, pero cuando alguno corre y gana comparte el premio con su familia, es uno de los principales valores de los rarámuris al que llaman ‘kórima’.
Con información de Verne