Los soldados de Estados Unidos tienen una peculiar forma de comunicarse que limita los diálogos a los estrictamente necesarios para llevar a cabo una tarea.
Esta filosofía también aplica al momento de redactar correos electrónicos. Esto con el fin de acelerar la transmisión de instrucciones y órdenes al máximo posible.
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Debido a que gran parte de la comunicación entre oficinistas sucede a través de esta plataforma, aprender una cosa o dos de la forma en la que los soldados se comunican en el campo de batalla puede no ser una mala idea.
Con el fin de evitar que ignoren nuestros emails y hacerle perder el menor tiempo posible a nuestro destinatario, es necesario adoptar el método militar Bottom Line Up Front (Bluf, por sus siglas en inglés).
Traducido a ‘Lo más importante primero’, este método propone colocar siempre lo más relevante al principio resolviendo las preguntas: qué, porqué, cuándo, cómo y dónde.
Una vez explicado lo relevante en menos de tres renglones, se le pedirá al destinatario realizar una acción de acuerdo a lo detallado en el párrafo anterior, como lo indica el ejemplo.
Área de desarrollo necesita el envío de los reportes trimestrales correspondientes al último periodo del año. Favor de facilitarlos a través de la carpeta compartida inmediatamente.
Este correo podría verse algo frío, pero si explicamos de manera clara y precisa lo que necesitamos de nuestro destinatario, las probabilidades de que nos responda rápido se incrementarán.
De esta manera matamos dos pájaros de un tiro: ahorramos tiempo al escribir un correo y aseguramos una respuesta en el menor tiempo posible.
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